Un ingrediente fundamental en cualquier decoración es el toque de color. Y en este artículo, el actor principal será el amarillo. Aunque sea un color supersticioso en el mundo del teatro, asociado a la muerte de Molière pocas horas después del estreno de El enfermo imaginario
, es un color alegre, vivo, intenso, optimista y muy moderno. Cercano a la simbología del sol y por ello muy apropiado para espacios con poca luz natural que necesiten de calidez en el ambiente. La variedad cromática del amarillo es infinita, como la de cualquier otro color, desde el amarillo claro a un amarillo mostaza extrafuerte. Podemos utilizarlo en muebles, revestimiento de paredes, pequeños objetos decorativos como lámparas y cojines o en sofás y ropa de cama. Eso sí, como con cualquier otro color intenso, necesita ser dosificado adecuadamente para no llegar a saturar el espacio. Combina mejor con materiales como la madera y otros colores en tonos neutros como grises y blancos e incluso cualquier gama de ocres. Abre tu mente a la decoración en amarillo con las ideas que te proponemos y deja que interprete toda su personalidad.
Este coqueto apartamento bautizado como Plume de Paon, exhibe precisamente ese efecto de cola de pavo real. Combina llamativos colores como el verde, el azul y el amarillo, y lo hace en perfecta armonía y equilibrio, sin resultar estridente. El amarillo de la pared del fondo y de los muebles bajos de la cocina está perfectamente complementado con el resto de la carga cromática para que esta original vivienda respire libremente.
Comenzaremos nuestra exposición del amarillo con unas pequeñas pinceladas en esta cocina. Una flores en el centro de la mesa y algún que otro detalle en la mantelería y cojines para las sillas son suficientes para capturar la atención y destacar de un entorno en el que predominan los tonos grises, oscuros y blancos. Un toque sutil pero con intención para reclamar cierto protagonismo.
Un tono frecuentemente utilizado es el amarillo limón. En esta otra cocina está presente en la isla central de la cocina, la zona de fuegos y las lámparas del techo. El blanco que rodea todo el conjunto hace que la percepción del amarillo destaque del resto pero sin llegar a invadir completamente la estancia. Recordemos el uso moderado del color para extraer de él el máximo jugo decorativo.
En esta otra imagen, un revestimiento amarillo añade mucha más alegría a una pequeña cocina ganada al pasillo tras una reforma. Al no tener salida al exterior, era necesario añadir un golpe de vida y alegría que amplia visualmente el espacio. La alfombra del suelo no quiere quedarse fuera de juego y se incorpora también al amarillo.
Nos quedamos en el salón y volvemos a las pequeñas pinceladas. La intención es aprovechar la luminosidad del amarillo y contrastar con el resto de elementos decorativos en tonos ocre y crema. El toque lo aportan los cojines y las rayas de las cortinas ambos a juego para alegrar la vida de este acogedor salón.
Después de contemplar el amarillo en suelos y paredes, a continuación os mostramos un uso alternativo. Ese sillón tan cómodo, testigo de tantas cabezaditas y lecturas, pero que nos hemos aburrido de su color inicial,, podemos volver a tapizarlo ahora en amarillo. Ganamos un nuevo elemento más alegre y cálido para nuestra decoración sin prescindir de sus abrazos.
En este otro salón, la combinación del amarillo del sofá más grande con los tonos claros y blancos del resto del mobiliario aporta una enorme sensación de calma y tranquilidad. Además, rompe la monotonía de una misma gama cromática generando un atractivo impacto visual.
Esta lámpara, denominada Sonne es una creación única fabricada a mano con pura lana virgen, siguiendo criterios de desarrollo sostenible en la elección de materiales, producción y transporte. Aporta un cierto aire retro ideal para un dormitorio o salón estilo vintage.
Hay que reconocer cierta valentía cuando se decide aplicar el amarillo de forma tan comprometida como la que vemos en la imagen. Este cuarto de baño transmite una intensa carga de creatividad y resplandor. La luminosidad natural que entre por la ventana se recrea y se refleja en los azulejos amarillos utilizados en todo el revestimiento del cuarto de baño, creando un mar de luz y brillantez.
Para finalizar nuestro recorrido por el amarillo, lo sacamos fuera de casa y lo vemos en el sencillo detalle de este colgador realizado a mano en macramé amarillo por los especialistas de Meublé. Otra llamativa pincelada que da un toque de alegría al espacio en el que está situada.