La decoración siempre viene acompaña de buenas ideas pero, hay que admitirlo, también trae como compañía a múltiples errores que están esperando los cometas para arruinar el bello momento que puede ser transformar la apariencia de un lugar.
Si bien identificar que estamos propensos a equivocarnos no es una solución para no cometerlos, sí es el primer paso para combatirlos. Después de esto ahora sí hay pensar en no errar; y este acto será mucho más fácil después de terminar de leer el libro de idea de hoy, así que te invitamos a disfrutarlo y por qué no, tomar nota, recuerda que el momento de decorar para esta Navidad está a la vuelta de la esquina.
Decorar implica convocar a muchos artículos que, pese a que estarán sólo un tiempo definido en casa, necesitan un lugar para ubicarse, lo que significa que tendrás más cosas de lo normal pero, ¿esto es un error?, ¡claro que lo es!, puesto que esto se traduce en una saturación visual y en un amontonamiento.
Para erradicar la posibilidad de errar con este aspecto, lo que debes hacer es decir adiós a ciertos muebles o adornos cotidianos, con el fin de generar espacio para tu nacimiento, árbol de navidad, series, etc. Puedes ocultarlos en tu ático, sótano, garaje o, pasarlos a un rincón de casa que tiene espacio de sobra.
Con la Navidad llegan colores tan llamativos como el rojo, verde y dorado; los cuales comparten una característica: no pasan desapercibidos ante los ojos de nadie. Debido dicha cualidad, muchas veces es complicado que estos combinen con las tonalidades habituales de la casa, lo que conlleva al error número dos que radica en no justificar la presencia vital de estos tonos.
La solución es sencilla, adquiere un mueble o adornos con alguno de estos tonos y déjalos exponer su color al máximo, pues es el que generará una concordancia y no parecerá que nada en casa combina.
Es una belleza tanto para la vista como para el olfato, disfrutar del olor, forma y textura que brinda un árbol navidadeño de verdad, pero esto conlleva un trabajo previo al acto de meter dicho arbolito y llenarlo de esferas, luces y demás.
A lo que nos referimos con el trabajo anterior es que protejas a tu piso de la tierra, rayones hechos por el tronco y la humedad que un árbol de esta índole trae consigo. Así que usa una alfombra, plástico o crea una base que lo separe del suelo.
Esta acción cuando no se piensa con detenimiento no es detectada como un error, pero a continuación te explicamos el porqué nosotros sí la consideramos así.
Lo hacemos debido a que es un riesgo latente llenar de velas toda la casa, recuerda que no está acondicionada para alojar este tipo de luz, lo que pudiera conllevar a accidentes que nadie merece experimentar. Por ello, si decides prender velas como decoración de fin de año, sólo hazlo por momentos o colócalas en áreas donde sí tengas las condiciones, como cerca de la chimenea donde… no hay telares, papel y se cuenta con un extintor.
Sobre todo en esta época del año, las ganas de embellecer el hogar nos ganan e incluso ciegan un poco, lo que se traduce en una decoración que pese a lo bonita que es se olvida un poco, o mucho, de la funcionalidad de cada área de la casa.
Pensemos en qué hubiera pasado con la ventana de este bello ejemplo si en lugar de disfrutar el bello contorno que se hizo, hubiera sido saturada por cortinas muy pesadas y plagada de motivos navideños; seguramente hubiera quedado sin abrirse todo este mes, ¿verdad?
Este error es uno de los más comunes y es que volvemos a lo mismo, la decoración navideña nos ciega con esas ganas de colorido y vida, a tal grado que nos hace olvidarnos incluso del estilo que domina la apariencia de nuestra casa, y definitivamente eso no debe de hacerse.
Decimos que no se debe hacer no porque exista una ley que se está rompiendo sino porque atentar con la vanguardia decorativa que elegiste, desde que embelleciste tu casa, es atentar contra todo lo que llevas construyendo desde que posees dicho hogar. La manera de no errar en este aspecto es buscar artículos de Navidad con formas, colores y texturas similares a todo aquello que comprende tu espacio. Ya sea algo minimalista, rústico, oriental, en el mercado de los adornos hay de todos los diseños.
Toda decoración , ya sea Navideña, de Halloween ,Día de muertos, Revolución o Independencia debe ir acompañada no sólo de adornos únicos y originales, sino de la intención de generar emociones, es decir, que se sienta armonía, miedo, misticismo, nacionalismo, amor a la patria.
Pese a que esto parece una condicional, en muchas casas esto no se logran, es decir, el embellecimiento no genera sensaciones y entonces todo se torna superficial, a tal grado que incluso puede pasar desapercibido.
Esto definitivamente debe dejar de hacerse, no se puede decorar un hogar partiendo de la idea de sólo embellecer las áreas que son más vistas, como la sala, fachada o vestíbulo.
Si se va a adornar una casa, se debe hacer esquina a esquina, de rincón a rincón, esto debido a que, si se hace de otro manera, habrá sitios que se tornarán olvidados y la esencia que se quiere tener en todo el hogar se verá estropeada porque hay sitios de éste que no destacan ningún tipo de sensación. Así que tenlo en mente, ¡es todo o nada!