Una casa de espectáculo en la Costa Brava

Marisa Alcore Marisa Alcore
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En el macizo de Begur, en la provincia de Girona, subidos en lo alto de un terreno las vistas son de espectáculo. Por este motivo, cuando el equipo de arquitectura Pepe Gascón tuvo que proyectar la vivienda Juncal & Rodney House tuvo claro desde el primer momento que el paisaje tendría que incluirse en el interior, formando uno de sus componentes más importantes. Porque como dicen los arquitectos, hay casas que se construyen por necesidad de espaldas a su emplazamiento. Sin embargo, esta no es una de ellas. Su diseño se abre a infinitas perspectivas sobre este sublime paraje de la Costa Brava. Dos plantas, que acogen un completo programa, y una infinidad de espacios exteriores que se enlazan con los interiores permitiendo que los dueños de Juncal & Rodney House habiten también el exterior.

En lo alto de un terreno, de cara al paisaje se construye Juncal & Rodney House. El terreno excavado resguarda a la vivienda por su acceso, liberando sus fachadas acristaladas hacia el Mediterráneo y la sucesión de macizos y calas que dan forma al horizonte. Un volumen longitudinal, en dirección norte sur, da forma a la casa, llena de recovecos iluminados por patios. Desde abajo, la casa se asoma tímidamente entre la naturaleza, apoyada sobre una plataforma. 

El acceso

Una carretera en pendiente nos conduce hasta la puerta de acceso a la vivienda. Colocado en la parte más alta de la parcela, el acceso se establece a través de una pasarela de madera abierta en el muro. Este, revestido con piedra de la zona e imitando a los muros de mampostería tradicionales, constituye uno de los elementos que vertebran la parcela, actuando de telón de fondo para la casa. Otro muro, más corto y alineado a la medianera vecina, conforman los dos límites de la casa. En sus otras dos fachadas, la vivienda no pone fronteras al espacio. 

El acceso divide el volumen en dos partes, articuladas a través de un patio central, desde donde se pueden contemplar las rocas del terreno excavado. 

La planta primera

Entramos a la casa por planta primera, acompañados de ese patio de dos alturas que se introduce también dentro. Aquí, en el hall encontramos un largo pasillo que en paralelo al muro nos distribuye esta primera planta. En esta altura encontramos las estancias más privadas de la casa: tres dormitorios y dos cuartos de baño, a mano derecha; y a mano izquierda la suite principal, equipada con cuarto de baño propio, vestidor y una gran terraza que se asoma al paisaje. Pero no es la única que encontramos en esta planta, en el ala derecha hay otras dos más.

La escalera

La escalera se construye paralela al muro y al pasillo, en la parte más exterior de la casa. Encerrado en un volumen transparente, este elemento de comunicación vertical cuenta con un único tramo, construido de manera minimalista. Así pues, la sencillez de sus formas, y la ausencia de sus tabicas, confieren ligereza a este elemento, que permite que el paisaje se vislumbre a través de él y que la luz le atraviese. 

La continuidad

La planta baja es el lugar de la casa diseñado no solo para contemplar el paisaje, sino para fundirse con él de manera física. Así, los cerramientos de vidrio se pliegan, como vemos en esta vivienda, permitiendo que los límites entre interior y exterior desaparezcan. Las estancias interiores en este nivel son infinitas y los habitantes ya no solo habitan bajo un techo, sino que cuando el clima lo permite, trasladan sus actividades afuera. Con este propósito, el pavimento y el techo se construyen con continuidad. 

La planta baja

En planta baja encontramos los usos más públicos de la casa. El salón comedor se ubican precisamente en esta parte de la casa, conectados con la barbacoa situada en el exterior y separados del resto de planta por el patio central. En el ala de la derecha tiene lugar la sala de la televisión y la cocina de diseño abierto. Un patio menor situado en la parte suoreste de la casa crea un recoveco en el volumen, donde tiene lugar el dormitorio de invitados y un cuarto de baño. 

La cocina

Como decíamos antes, el muro de contención del terreno construido en piedra toma gran importancia no solo a nivel constructivo, sino también estético. Constituye el fondo de todos los espacios interiores de la casa, forzando las visuales al lado opuesto, donde la casa se abre al paisaje. En el patio que encontramos en la cocina, al igual que ocurre con el central, es posible visualizar las auténticas rocas del terreno excavado, formando parte de la decoración de la casa.

La transparencia

El contraste en la distribución de ambas plantas es más que visible. mientras que la inferior es diáfana y transparente, la interior se compartimenta para ofrecernos las diferentes estancias de noche. Desde esta perspectiva, es posible ver como al final, ese volumen longitudinal del que hablábamos antes ha resultado quebrarse, retranquearse y doblarse, formando un abanico que establece de manera clara las relaciones entre la casa y el lugar.

Otros pasatiempos

Además del verdadero espectáculo que supone esta vivienda encontramos otros pasatiempos. La casa ocupa una pequeña esquina de la parcela, liberando el resto de superficie para completar el programa de Juncal & Rodney House. Una zona pavimentada, y otra destinada a jardín, terrazas cubiertas por un voladizo, y una larga piscina son algunas de las posibilidades que se nos ofrecen. 

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