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Tener una casa ordenada y limpia nos ayuda a mantener la armonía y buena energía en el hogar. Debemos reconocer que después de un día agitado en el trabajo o cuidando a los niños, limpiar la casa es una tarea díficil. Sin embargo tómalo como un reto y planifica una rutina de limpieza que puedas cumplir día a día con el apoyo de toda la familia. Verás que en poco tiempo tener una casa ordenada hará que tu hogar se vea y se sienta más cómodo y bonito.
Este magazine esta destinado a ayudarte en este reto familiar, te daremos 7 consejos para que el orden y la limpieza se vuelvan un hábito cotidiano que te permita tener tu hogar siempre a punto. ¡Anótalos todos!
Parece un hábito sencillo, pero no lo es. Tiramos donde sea las llaves y la cartera al llegar a casa y al volver a necesitarlas no recordamos donde las dejamos, perdiendo un tiempo valioso en su búsqueda. Por eso es importante asignar lugares para nuestros objetos de uso más cotidiano y así sabremos siempre donde encontrarlos.
Este consejo es básico, no te dejes llevar por la procrastinación, así que recuerda si ves algo fuera de lugar, no esperes demasiado tiempo para arreglarlo, porque tarde o temprano ¡vas a tener que hacerlo!
Un baño limpio y ordenado no es un lujo, sino algo necesario. Siempre ten la disposición para limpiarlo todos los días y no dejar que los sedimentos y manchas se acumulen en los sanitarios y la ducha. Recuerda que la grifería también debes de limpiarla y pulirla para que este siempre brillante y como nueva. Pasos simples pero todos ¡muy importantes!
Cuando te despiertes abre las ventanas de tu dormitorio para hacer circular el aire. No por algo los arquitectos siempre priorizan las grandes ventanas en los dormitorios. Puede parecer una rutina secundaria, pero de esta manera ayudas a eliminar los gérmenes que se han acumulado durante la noche y reducirás la incidencia de las alergias.
Es preferible lavar los platos, vasos y utensilios después de comer, la comida incrustada es más difícil de eliminar y dejarla al aire libre traerá olores y pequeños bichos sobretodo si la dejas durante toda la noche, además de la impresión de desorden que da una ruma de platos sucios si tienes invitados imprevistos.
Tengas un espacio de lavandería o no, la ropa sucia no puede estar regada en el baño o el dormitorio. Siempre colócala en un cesto donde se acumule antes del día de lavado. Lo ideal es tenerlo en un lugar ventilado como el patio o lavandería.
Para cerrar nuestros 7 consejos te daremos cuatro pasos sencillos y eficaces para mantener limpia y ordenada tu casa:
Utiliza una aspiradora todos los días para limpiar el piso de la casa y retirar el polvo de los muebles.
Limpia a profundidad tus pisos dos veces por semana.
Cambia la ropa de cama cada semana, así descansarás mejor.
Reorganiza tus muebles, lava las cortinas y quita el polvo de tus repisas por lo menos una vez al mes.
Para complementar tu nueva rutina de orden y limpieza te damos 8 consejos para llenar tu hogar de energía positiva.
