¿Cómo elegir la silla correcta para tu escritorio?

IGNACIO MARTÍNEZ ARGÜELLO IGNACIO MARTÍNEZ ARGÜELLO
Fauteuil MARLENE, CMC-CONCEPT CMC-CONCEPT Eclectic style living room
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Decorativas integradas al espacio, o netamente operativas. Las sillas de escritorio han avanzado mucho en los últimos años, y en estos momentos podemos ver modelos que combinan estéticas contemporáneas y esculturales sin relegar comodidad y soporte a la función.

En esta nota veremos que aspectos hay que tener en cuenta a la hora de comprar una silla de escritorio y desarrollaremos las nuevas tendencias.

Conceptos generales 1

Existen dos grandes y nuevos aspectos en materia de sillas de escritorio. La primera, es que la tecnología nos acompaña cada vez más día a día y ya no es necesario atarse a un escritorio para estar conectados y trabajar. Las notebooks, tablets y celulares con capacidades más complejas nos facilitan el trabajo on the go y hoy podemos encontrarnos trabajando en diversos lugares de nuestra casa con infinidad de combinaciones y posibilidades.

Conceptos generales 2

El segundo factor, es que los ambientes modernos, especialmente en áreas urbanas, tienden a aprovechar mejor los metros cuadrados, y cada uno de estos se utiliza para múltiples actividades. Por eso, los espacios asignados al trabajo en el hogar, ahora se integran al living, o la cocina, facilitando la fluidez entre tareas y la optimización del tiempo.

Si bien, podemos pasar de un dispositivo electrónico a otro para cumplir con nuestras tareas, hay ciertas requisitos que nuestras sillas de escritorio deben contemplar.

Soporte Lumbar

Si nuestra columna es cuasi lineal, pensaríamos que cualquier silla de respaldo recto serviría para trabajar. Sin embargo, nuestra espina dorsal posee tres curvaturas y nuestra silla debe brindarles soporte. Sin el mismo, las personas tendemos a encorvarnos mientras trabajamos frente a la computadora provocando dolores y fatigas musculares.

El recurso más utilizado para brindar soporte lumbar es un parche o protuberancia acolchada en la sección inferior del respaldo.

Saber adaptarse 1

Naturalmente, la gente alta tiene espinas más largas que las de menor estatura. Otras personas tienen torsos o piernas más cortas. Para asegurar que cualquier usuario pueda trabajar cómodo, especialmente durante el trabajo, es que las sillas de oficina deben adaptarse a los distintos tipos de persona. Es por eso que existen respaldos y apoyabrazos ajustables en altura y posición.

Saber adaptarse 2

Si el brazo está muy alto, entonces los músculos en los hombros estarán tensos y provocará dolores en la zona del cuello.

Si el brazo está muy bajo, la persona deberá inclinarse de un lado u otro para poder descansar en la posición.

Si los brazos están muy juntos, no permitirá estar cómodos sentados en la silla. Mientras que si los brazos se encuentran alejados, estaremos tensionados por mantener la posición ya que nada nos contiene.

Saber adaptarse 3

Las ventajas de los apoyabrazos ajustables también afectan al diseño, ya que no siempre las sillas caben debajo del escritorio con lo cual se verá raro en el ambiente y estaremos trabajando de forma incómoda.

Otro factor a considerar, es la profundidad de la silla. Si esta es insuficiente, nos veremos obligados a trabajar sobre el borde del asiento. La solución, es un sistema de reclinado en el respaldo.

Bascular y giratoria

Una de las afecciones más comunes entre los usuarios de sillas para trabajar se produce al “hamacarse” en éllas. Nuestra espalda puede dañarse ya que un respaldo rígido no permite que acompañe nuestros movimientos. Lo mismo ocurre con el sistema giratorio. Si la silla donde nos sentamos gira trescientos sesenta grados, entonces podremos movernos con libertad hacia cualquier ángulo evitando las tensiones en el cuello y facilitando el acceso a nuestro escritorio.

¿Ruedas o no ruedas?

Una silla se apoya sobre ruedas o una base con patas. Ambas opciones son válidas, pero la segunda requiere de mayor fuerza para entrar y salír de la misma. En el caso de las oficinas, llevar una silla pesada con patas de una sala a otra puede ser una tarea molesta.

En el caso de tener ruedas, se recomienda que la base tenga cinco puntas para mayor estabilidad y evitar que la silla pueda volcarse.

A tener en cuenta: Existen ruedas especiales fabricadas en gomas suaves que no dañan los pisos al deslizarse(especialmente los de madera). De no contar con esta opción, es recomendable colocar alfombras plásticas debajo de la silla para evitar dañar el lugar.

Respirar

Pocas sensaciones son más desagradables que una silla calurosa, pegada a nuestra espalda mientras trabajamos.

Por eso, elegír un género que permita que nuestros muebles respiren es escencial. Existen modelos con mallas resistentes al peso humano y livianas a la vista, que aportan practicidad en su mantenimiento y una estética futurista. Para los que gustan de sillas acolchonadas y tradicionales, los materiales como los cueros ecológicos, pueden ser atractivos en precio pero de practicidad y vida útil dudosa. Es preferible optar por materiales de tramas abiertas o cueros.

Tendencia

Como ya lo mencionamos anteriormente, los espacios de trabajo están mutando. Las oficinas ya no son las mismas, intentando emular livings o espacios más cómodos y multifuncionales. Por eso, hoy en día, podemos encontrar sillas de comedor en nuestros escritorios, o sillas operativas agrupadas en un comedor formal que a su vez sirve de mesa de reuniones. El diseño no tiene barreras, solo hay que entender qué porcentaje de tiempo dedicaremos al trabajo para elegir el balance perfecto  entre comodidad y estética.

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